lunes, 23 de enero de 2012

STAN: "¡Ay, dios mio, han matado a Megaupload!" KYLE: "¡¡¡Hijos de Puta!!!"



Tan trágica noticia ha tenido que ser la que me ha hecho salir de mi letargo post-navideño. 


¿Saben? Yo siempre he sido de los que se lo toman todo con mucha calma, de dejar las cosas para mas tarde, de no hacer nunca hoy "lo que puedas dejar para mañana", como se puede comprobar por lo espaciado de mis entradas... y tenía una lista de películas, de terror y otros géneros afines, que pensaba ir descargando progresivamente, sobre todo ahora que los Reyes me han obsequiado con un disco duro externo de 2 Terabytes... ¿Cuando aprenderé que las oportunidades hay que aprovecharlas en el momento...? Sigh... 

Adios, Megaupload, adios, snif... Resqient In Peace, pobrecito...

Si, ya se que quedan varias alternativas, como FileServe (mucho mas lento), Hotfile, Freakshare y el nunca lo bastante maldecido RapidShare, con todas sus putas limitaciones e incomodidades... pero era Megaupload el que albergaba la mayoría de contenidos freaks (películas inencontrables, solo conocidas por mi y cuatro pelagatos, incluidos el director y su familia) Ahora todo ese material tendrá que ser resubido, lo cual no se hará en un día, y habrá que esperar a ver que álguien se acuerde del episodio ese de la serie tal, en su versión cual, donde salía en un cameo la celebridad pascual... afrontémoslo, el mundo de la descarga ha sufrido un duro golpe. Estoy encabronado, y sobretodo, triste, muy triste.

Y lo estoy, no lo negaré... por razones esencialmente EGOISTAS. Por que, no nos llevemos a engaño, por muy "inadmisible"  que encontremos este asunto, por mucho que nos rasgemos las vestiduras por este presunto ataque a la libertad, a la democracia, a los derechos humanos, a la Madre Patria y a la identidad sexual de las gallinas...  es comprensible. Existen leyes sobre la propiedad intelectual y otras muchas que Megaupload se pasaba por ahi abajo. 

Y sobre todo, está la figura de su fundador, que, tampoco merece la pena que nos autoengañemos al respecto... es lo que es: Un delincuente.


Me temo que se le acabó el chollo, "doctor Kimble"...
Podremos criticar la forma en que se ha llevado a cabo la operación, asi como otros tantos detalles, como el hecho de que se tendría que indemnizar de alguna forma a todos los que hacían un uso legal de Megaupload, compartiendo archivos personales, (que ahora no pueden recuperar), porque es evidente que no todo el contenido de Megaupload era ilegal... (en cualquier caso, eso si, sobran determinadas represalias que yo, por mi parte, no pienso justificar), pero la cuestión básica es que hemos de comprender que no estén los "mass-media"(ni los autores, ni los artistas)  por la labor de darnos gratis su trabajo, así, por la cara. Incluso el hiper tolerante en estas cuestiones Álex De La Iglesia ha reconocido que cuando se bajan películas producidas por el le sabe "un poco mal". Es normal, pongámonos en su lugar... ¿No resulta por otro lado pardójico que les despreciemos por "peseteros", mientras admiramos sus obras y flipamos con ellas?


Recuerdo cuando era "chinorri" (infante) y mis compañeros de clase se compraban videoconsolas piratas y videojuegos piratas. Y yo siempre les recomendaba no hacerlo, y me negaba en redondo a hacer lo mismo... lo que me costó alguna que otra risita y collejuelas varias... luego, con la llegada de internet, al principio me hacía el "remolón"... y al final caí... sucumbí al atractivo  de las descargas gratis. 
Siempre sentí algo de remordimientos... que intenté atenuar haciendo mi acción algo mas leve. Limitando, por ejemplo, mis descargas a libros y comics descatalogados e inencontrables (lo cual no quita culpa, pues sige siendo material con Copyrigth, pero le resta gravedad a mi juicio), material gratuito de libre distribución y películas casposas de serie B y Direct To Vídeo ochenteras/noventeras, de esas que siempre quise ver y no pude (aparte del porno, claro, eso es básico...) 


¿Voy a dejar las descargas a partir de hoy? No, por supuesto que no, seguiré con lo mio... mientras me dejen, claro, porque hoy es Megaupload, pero mañana puede ser Mediafire (Dios no lo quiera...) Y como hasta ahora también, de tanto en tanto, paralelamente, seguiré visitando regularmente tiendas "freaks" y mercadillos varios, a dejarme la pasta en productos de calidad, con olor a papel, que puedes leer tumbado en un catre sin tener que estar pendiente de bloqueos y mil hostias, o en películas de las buenas, en edición coleccionista mega hiper especial, cargado de extras, documentos y entrevistas hasta con la señora de la limpieza del set de rodaje, que de verdad valen los 40 o 50 euros que cuestan (tirando bajo...) Y así, calmaré mi caótica conciencia unos días mas, habiendo hecho mi "buena acción del mes" (bueno, o del trimestre, o del curso, o del año...) y aportando mi granito de arena a la industria para que no se hunda y puedan comer. Comed, comed... así os atragantéis, hijos de pu... digooo... bueno, eso.


Me haría sentirme algo mezquino el recurrir a la (por otro lado obvia y flagrante) avaricia de la industria para justificar algo que, en el fondo todos lo sabemos, es injustificable. 


Aunque, bueno, tampoco es tan grave como algunos lo pintan, ¿no? Quiero decir que vale, está mal, pero tampoco es como para ir a la cámara de gas... mas bien pecata minuta, ¿no? Vamos, digo yo...

2 comentarios:

A. Nònim dijo...

¡Arrenpentíos, pecadores!

... ¡y volved al P2P!

carlos martinez osorio dijo...

¿Dando tú consejos a tus compañeros de clase de que no pirateasen? Qué risa me entra...

Yo estoy en contra de la piratería (cuidadito con que alguien me piratee alguno de mis cortos, je, je), pero estoy hasta las narices de una industria distribuidora que estrena (cuando estrena, que esa es otra, que se lo digan a la última de Claude Chabrol o la primera del británico Steve Macqueen, perdóname Sacerdote por ponerme elitista y fino) con dos años o más de retraso y con una empresa discográfica que permite atentados al buen gusto en forma de ciertos cantantes (la cantidad de nombres que se me ocurren no cabe aquí). Algunos se merecen el pirateo, no cabe duda, y si el pirata va con cien cañones por banda disparándoles para hundirles, mejor (otra vez perdón, Sacerdote, me ha salido la vena poética, ja, ja). Saludos.