martes, 17 de abril de 2012

ARKHAM ASYLUM. UN LUGAR SENSATO EN UN MUNDO SENSATO (1º Parte)





"
          ...A veces... a veces creo que Arkham es una cabeza. Una cabeza enorme que sueña nuestra existéncia.
                     
                    Quizá es tu cabeza, Batman.

                  Arkham es un espejo.

                 Y nosotros, somos tu...      "
    
                                                                                  

                                                      El Sombrerero Loco en "Arkham Asylum", de Grant Morrison. (DC comics, 1989)


Despues de Spiderman, Batman es el personaje de comic con mayor número de enemigos y rivales. Al principio estos eran tan coloristas como los del Hombre Araña, pero a partir de los 70, con la reinvención del personaje por parte del guionista Denny O'neil y el dibujante Neal Adams, el mundo de Batman fué adquiriendo un tono mas tenebroso y serio, y sus personajes se hicieron, dentro de lo que cabe en un comic, mas realistas.
¿Como se encajaba esta nueva visión realista con esos malos extravagantes que se vestían con coloridos trajes y cometían delitos basados siempre en un mismo tema? Facil: estos individuos no están, obviamente, demasiado equilibrados. Demasiado en su sano juicio. Demasiado en sus cabales. Vamos, que están locos. Asi de claro. Chalados, mochales, grillados, flipados. Como una puta cabra. Y ademas, son criminales.

¿Y que se hace con los criminales locos? No se les pone en la carcel, con los demas. Al menos, no en E.E.U.U. (Ya se sabe, "Spain is different"...) De modo que en 1974, en el número 258 de "Batman", el guionista Denny O´neil crea un hospital psiquiatrico, y pone como residentes en el mismo a dos de los enemigos mas notorios del murcielago, Dos Caras y el Joker. Lo ubica en Nueva Inglaterra, y en un rendido homenaje al maestro del horror de Providence, lo bautiza como "Hospital Arkham" , en referencia a la famosa ciudad ficticia de los Mitos de Cthulhu (no era el primer guiño que se hacía en los comics de Batman a H. P. Lovecraft, ni sería el último.)

En el número 326 de Batman, correspondiente a Agosto de 1980, otro guionista, Len Wein, ya sea por despiste o por que es mas chulo que un ocho, lo rebautiza como "Arkham Asylum", y desde entonces se queda con el nombre. "Asylum" es lo que se conoce como un "False Friend" ("falso amigo") inglés-castellano, es decir, dos palabras de dos idiomas que son muy parecidas pero que en realidad significan cosas diferentes, por ejemplo, el catalán "Falç" suena a "falso", pero en realidad significa "guadaña" ("Bon cop de falç...") En catalán, "falso" es "fals".

"Asylum" suena a "asilo", y así es como se ha traducido casi siempre el nombre de este ficticio centro en nuestro idioma, "Asilo Arkham". Pero "asilo" es como llamamos en España a esas casas de cuidados donde llevamos a los abuelitos cuando ya son muy  mayores para quitarnoslos de encim... digo, para que estén bién atendidos, y eso para los angloparlantes siempre a sido una "Old People's House" ("casa de gente mayor".) La correcta traducción de "asylum" sería "manicomio", un término  que a día de hoy es, digamos... incómodo por aquello de que "ahora-ya-no-se-llaman-manicomios-sino-centros-psiquiatricos-a-pesar-de-que-en-la-práctica-son-la-misma-mierda" (¡Santa corrección política, Batman!)

Como decíamos, en un princípio se ubicó el centro en Nueva Inglaterra y en el solo estaban Dos Caras y el Joker, pero pronto, por inercia, empezaron a endiñar ahí dentro a toda la fauna urbana gothamita de "freakys" disfrazados que quebrantan la ley, y se impuso una re-ubicación del centro en las afueras de Gotham City. Así solían solventar antes las incoherencias en la DC Comics, por la patilla, antes de inventarse los lios esos de los universos paralelos que tantos dolores de cabeza han aportado...

Con el paso del tiempo, el Arkham Asylum ha ido haciéndose mas popular y famoso, y hoy día es ya un elemento fundamental del mundo de Batman, tan unido a el como su ciudad Gotham, su Batmovil o los personajes secundarios como el mayordomo Alfred. Su popularidad está, de hecho, empezando a traspasar los comics, y parece destinado a convertirse en un icono cultural; hay quién ya usa el término "Arkham" para referirse al esterotipo de manicomio tenebroso y macabro ("esto es un arkham"), o incluso, en plan de sorna, como sinónimo de "centro psiquiatrico"...


Historia ficticia del Arkham Asylum






Plano del primer Arkham

En 1922, el psiquiatra Amadeus Arkham decide transformar la mansión heredada de su familia en un manicómio especializado en criminales con enfermedades mentales, al que bautiza con el nombre de su fallecida madre, "Elizabeth Arkham". El doctor Arkham consideraba  que el sistema penal no era justo con esta clase de delincuentes, y quiso crear un lugar donde se les diera el trato adecuado.
Irónicamente, cuando en 1929 intentó asesinar a su corredor de bolsa, Arkham se convirtió en paciente de su própia institución.

Amadeus Arkham. En casa del herrero...

Con los años, el centro fué creandose una pésima reputación, sobre todo a raiz de las demasiado frecuentes fugas de sus pacientes, asi como las prácticas "irregulares" de algún que otro profesional.
Cuando el centro fué destruido por completo por el criminal conocido como "Bane", Arkham se trasladó a la mansión Mercy bajo la responsabilidad del doctor Jeremiah Arkham, sobrino de Amadeus, quien acabó repitiendo la historia de su tio, enloqueciendo y siendo encerrado en su propio centro (sin comentarios.)

Jeremiah Arkham. De tal palo...

Se cuentan muchas historias sobre ese tenebroso lugar, lleno de criminales extraños, pintoréscos (Jervis Tetch el "Sombrereo Loco", Edward Nashton alias E. Nygma), de aspecto desfigurado o deforme (El Joker, Harvey "Dos-caras"), cuando no directamente monstruoso (Waylon "Killer Croc" Jones.)

Los comics de Arkham

Aquellos comics y episodios de Batman en los que Arkham ha tenido un protagonismo central.

              Arkham Asylum




1989. Novela gráfica de 129 páginas. Guión: Grant Morrison. Arte: Dave McKean.

Este comic es el verdadero culpable de la popularidad ascendente del Arkham Asylum. Antes de el, no era mucho mas que una presencia anecdótica en el universo de Batman. Morrison y McKean lo convirtieron en lo que es hoy día.
El escocés Grant Morrison es uno de los guionistas de comics mas singulares que existen. Siempre ha tenido fama de excéntrico, de raro, incluso de  desquiciado. Sus historias a menudo se han tildado (no siempre sin razón) de grotescas, absurdas y bizarras. Ya se sabe, la linea que separa lo sublime de lo ridículo es demasiado fina, y a veces Morrison no la ha distinguido muy bién... pero con este comic, Morrison alcanzó el cielo. Al menos para mi, claro, ya que esta obra, como casi todas las de su autor, tiene tan apasionados adoradores como detractores, y mientras algunos la acusan de ser una pedanteria incomprensible para gafapastas y pseudointelectuales, otros la ven (la vemos) como una de las mejores historias jamas escritas del hombre murcielago, junto a los "Año Uno" y "Dark Knight" de Frank Miller.

Batman acude a la llamada del comisario Gordon. Ha habido un amotinamiento en Arkham. Los pacientes se han apoderado del centro y nadie sabe como ha ocurrido. retienen al personal del centro como rehenes, mientras la policia ha acordonado la zona. Han estado haciendo toda clase de peticiones absurdas a la policia: pizzas, maniquies, jugetes... solo les queda una última petición. Exigen que Batman entre en el edificio. "Te queremos aquí, con nosotros, en el manicomio, donde debes estar..."

Se inicia entonces un viaje psicológico que llevará a Batman a enfrentearse a sus miedos y debilidades. Los internos de Arkham le obligarán a jugar un espantoso juego del gato y el ratón, en el que el murcielago tendrá que exorcizar sus demonios interiores. Un viaje pesadillesco a la locura, al lado oscuro de la mente humana. Bienvenido al manicomio.

Paralelamente, a modo de flashback, nos adentraremos en los diarios de Amadeus Arkham, que nos contarán la historia del centro y de su creador.

A lo largo de sus 120 páginas, "Arkham Asylum" apenas tiene un solo momento de acción. Aquí, Batman está mas lejos que nunca de ser un "superheroe", le vemos en su momento mas fragil.  Se profundiza como pocas veces en su psique, y abandonamos el género de aventuras para adentrarnos en terrenos del mas puro terror psicológico, en un escenario introspectivo que a ratos casi recuerda a David Lynch. Guste o no, no se puede negar lo arriesgado de la propuesta, y sorprende que un comic tan experimental y poco comercial tuviera en su momento el éxito que tuvo. De hecho, en un principio la obra iba a ser todavía mas osada. Grant Morrison tenía pensado mostrar a un Joker travestido luciendo corpiño, ligueros y medias, estilo Madonna, y las alusiones sexuales iban a ser mucho mas francas y directas. Pero los editores consideraron que eso ya era demasiado (este Grant...)

Un lascivo Joker toca el "punto debil" de su archienemigo para provocarlo...
Dave McKean, el mítico portadista de "Sandman", aporta su collage de estilos pictóricos a las impactantes ilustraciones, como es habitual en el, a caballo entre el fotorrealismo, la abstracción onírica y un caricaturismo espeluznante, y combina tonos oscuros con colores chillones para introducirnos en un mundo esquizofrénico.

El aterrador Joker de Dave McKean.
Como curiosidad comentar que en este comic Morrison se aventura, por primera vez que yo sepa, a dar una suerte de "explicación cietífica" de la locura del Joker, que se ha hecho bastante popular.  Según comenta el personaje de la doctora Ruth Adams, el Joker padece un desorden neurológico similar al Síndrome de Tourette. No tiene control sobre su percepción. Su cerebro está constántemene recibiendo toda clase de datos sensoriales, es "demasiado consciente de todo", y su único recurso ante ello es dejarse llevar. No tiene una verdadera personalidad, si no que la va cambiando según las circunstáncias, un día es un payaso bromista y travieso y al día siguiente un sádico despiadado. "...Se crea a si mismo cada día. Se ve como el señor del caos, y ve el mundo como un teatro del absurdo...."


El Último Arkham



1992. Arco argumental de la serie "Shadow of the Bat", números 1 a 4. 96 páginas. Guión: Alan Grant Arte: Norm Breyfogle

El otro "Grant" británico de DC comics, Alan Grant (de niño los confundía...) estrenó su propia serie de Batman que se extendió a lo largo de 94 números durante la década de los 90 del pasdo siglo. En ella creó docenas de nuevos personajes para el mundo de Batman, que aportaron bastante. En los primeros cuatro números de la serie se desarrollaba la historia "El último Arkham", donde aparecía por primera vez Jeremiah Arkham, el sobrino de Amadeus. Decidido a demostrar que el no es igual que su tio, Jeremiah llega a arkham dispuesto a romper todo lazo con el pasado; reestructura por completo el centro de arriba a abajo, y quema los antiguos recuerdos de su tio, su diario entre ellos. Grant se inspiró en las tesis del psiquiatra B. F. Skinner  para crear a este personaje de firmes convicciones conductistas ("¿Que importa cuantas veces piense álguien en cometer un asesinato? lo único importante es cuando actua... ¡Ni todos los pensamientos del mundo matarían a un hombre!")

También debuta en esta historia un nuevo enemigo de Batman: el escalofriante Victor Zsasz, un asesino en serie  con el torso cubierto de cicatrices, que el mismo se autoinflinge con su cuchillo cada vez que comete un asesinato para recordarse a si mismo que "también es humano". Llama a sus víctimas "zombis" y cree que les hace un favor librándolas de sus vidas miserables. Cínico y cruel, Zsasz era un personaje que daría mucho que hablar.

El demoníaco Mr. Zsasz retratado por Dustin Nguyen para la portada de "Streets of Gotham", Nº4 (¡glups!)

La historia nos cuenta la investigación de unos asesinatos que sigen la pauta de Zsasz, cuando este está encerrado en Arkham. ¿Un imitador, o el propio Zsasz que entra y sale de Arkham a su antojo...? En el transcurso de las pesquisas, Batman pierde la paciencia con un teniente de policía algo creído e imbécil, llegan a las manos y Batman, dejándose llevar por la rabia... le acaba matando sin querer. Esto lleva a Batman a ser encerrado en Arkham como un interno mas, uno que el buén doctor se tomará como un reto personal...

De nuevo tenemos a Batman encerrado en Arkham, esta vez directamente como paciente. De nuevo tenemos la insinuación de que Batman no es, en el fondo, demasiado diferente a los sujetos con los que lucha... ¿o quizás si? La historia no es tan profunda y vanguardista como la anterior, tampoco lo pretende, lo que si es es una magnífica aventura, acompañada con el expresivo y semicaricaturesco trazo del gran dibujante Norm Breyfogle, y la ágil prosa y diálogos de Grant, que se luce con las nihilistas proclamas de Zsasz:

"Dios no existe, comisario Gordon. ¿No se lo ha dicho Batman? Dios jamas permitiría que ocurrieran cosas tan horribles, ¿Verdad, Batman? El hombre no necesita ayuda divina. ¡El se hace a si mismo! Yo elijo exterminar a los zombis. Yo elijo matar."

Arkham: El Manicomio del Diablo



1995. Número único del evento "Underworld". 40 páginas.  Guión: Alan Grant. Arte: Brian Stelfreeze y Rick Burchett.

Nos encontramos en el nuevo asilo Arkham, instalado en la mansión Mercey, despues de que el viejo fuese destruido por un brutal villano conocido como "Bane" (que por cierto, será el malo de la próxima película de Batman.) El doctor Jeremiah Arkham realiza su rutina. Revisa las grabaciones de la celda de Kryppen, un paciente experto en toxicología al que se mantiene vigilado con cámaras por seguridad, pues es capaz de crear venenos con cualquier cosa. Esa noche encuentra algo diferente: Kryppen habla solo... hasta ese momento no había mostrado alucinaciones. Parece estar haciendo una especie de trato con "alguien" a quien promete un alma...
 La noche es extraña, hay tormenta y el doctor Arkham nota como un presentimiento, hay algo raro en el ambiente, los pacientes están mas alterados de lo normal y cuesta contenerlos: Enigma se enzarza en una pelea con otro interno con el que jugaba al poquer en la sala de recreo porque le acusa de tramposo, y un pobre diablo obsesionado con Benjamin Franklin escapa por un instante al control de los guardias para subirse a la antena del tejado, siendo fulminado en el acto por un rayo, que ademas provoca un apagón en todo el edificio. Los pacientes estallan en un frenesí descontrolado de destrucción, pero el motín es sofocado enseguida por los guardias. Pero durante el motín, Kryppen se ha infiltrado en la cocina y utiliza su conocimientos químicos para envenenar los suministros del hospital. Despues de servir la cena, todos empiezan a padecer fuertes dolores...



 Kryppen a continuación se pone a emitir por radiofrecuencias un mensaje en el que llama a Batman. Baman responde y acude a Arkham. Allí Kryppen le explica que ha hecho un trato con el Diablo para que le haga dueño del mundo. "Pero no quiere mi alma", dice, "si no la tuya."

El trato es: Batman debe matar a un hombre cualquiera, y entonces Kryppen le dará a los demas el antídoto del veneno. Si se niega, todos morirán...

"Mata a uno o mueren todos. Debes hacerlo. No serías Batman si no lo hicieras. Si les salvas, claro, no te lo agradecerán. Robarán y matarán, abominables como siempre han sido. Pero incluso sabiendo eso, no puedes dejar que mueran. Eres Batman."

Alan Grant vuelve a sorprendernos con una de sus "pequeñas" grandes historias. En este único número nos presenta a Batman ante una de las decisiones mas difíciles de su vida: quebrantar el bíblico "no matarás", precisamente para salvar vidas...  una vez mas vuelve a haber matices de terror en el relato, como en "Arkham Asylum", si bién con un tono mas ligero. Brian Stelfreeze y Rick Burchett colaboran para darle al comic un look  con cierto aire "cartoon", a lo que contribuye el vivaz color de Linda Medley.

La historia se encuadraba dentro de la macro-saga "Underworld", una aventura que involucraba  a todos los superheroes de DC en la lucha contra un demonio recolector de almas llamado Nerón (me siento homenajeado...)

(CONTINUARÁ)










5 comentarios:

carlos martinez osorio dijo...

Francamente bueno tu artículo sobre el Asylum, espero que no tardes lo habitual en tí en continuarlo. Espero también que se decidan a incluir el Asylum de una vez en alguno de los filmes, que yo recuerde de momento no ha aparecido en ninguno. Saludos.

Sacerdote dijo...

Si ha aparecido: Brevemente en el final de "Batman Forever", en alguna escena de "Batman y Robin" y en "Batman Begins" (es donde trabaja el Espantapájaros, y de donde se escapan los locos al final.) Se le menciona un par de veces en "El Caballero Oscuro"

Anónimo dijo...

Buen post... no parece tuyo... (el joker)

carlos martínez osorio dijo...

De acuerdo, querido Sacerdote (sorry por olvidarme del Espantapájaros) , aunque mejor olvidar los dos filmes de Joel Schumacher. Saludos

RAY dijo...

Sin duda el mejor será Arkham Asylum: Serious House on a Serious Earth...antes de que Morrison comenzara a escribir ciencia ficción y quisiera homenajear a la Edad Dorada jajaja

Ese de Underworld Unleashed también es interesante aunque es corta la historia

Y Alan Grant es de los que más ha aportado a BATMAN y creo que no le dan su lugar, simplemente haber escribido todo Shadow of the Bat y en su primer arco crear a ZSASZ y a JEREMIAH ARKHAM 2 grandes aportaciones sin duda al mito del murciélago

Este GRANT si es GRANDE y no como el Morrison sobrevalorado